online web builder

ACTIVIDADES DE MENTORING

ENFOCAR A LA EXCELENCIA TODO EL SISTEMA PSÍQUICO

Soluciones y orientación de la persona en los distintos ámbitos: orientación familiar (convivencia matrimonial y problemas de la adolescencia), orientación académica (escolares y universitarios), psicología clínica (psicodiagnóstico, tratamientos, terapias, entrenamientos), orientación profesional (coaching, proyectos, laboral, empresarial, legal), ética y deontología profesional.
Modalidades: consulta breve y consulta completa.


VÍCTOR MANI-RIBERA • JOAN ROMANCE ULLOD • ERNEST VIDAL ARRIBAS

1

Consulta y asesoramiento para la orientación personal, académica y laboral: 

• Al terminar las distintas etapas de enseñanza media, bachillerato y grados superiores o universitarios. 
• Al empezar un trabajo profesional: acompañamiento a los periodos de prácticas, iniciación y de aprendizaje.

2

Enfoque antropológico de nuestras actividades principales

TRABAJO Y ENTRENAMIENTO 
En lo importante, como la familia y la educación de los hijos y los negocios, no hay atajos: hay que ser operativos, hay actuar con seriedad y trabajar con rigor. Es imprescindible enfocar y enfrentar los problemas, para rectificar a partir de los fallos y recomenzar sin desfallecimientos. Las crisis sólo se solucionan trabajando y entrenando competencias y habilidades. Pero es imprescindible aprender a actuar sin estrés y acudiendo a la ayuda psicológica profesional.

CONSULTA PSICOLÓGICA INDIVIDUAL Y PERSONALIZADA
Los sentimientos desempeñan un papel fundamental en las decisiones personales que la vida nos obliga a tomar. Es cierto que los sentimientos muy intensos pueden crear estragos en el razonamiento, pero también lo es que la falta de conciencia de los sentimientos puede ser absolutamente desastrosa, especialmente en aquellos casos en los que tenemos que sopesar cuidadosamente decisiones de las que, en gran medida, depende nuestro futuro (como la carrera que estudiaremos, la necesidad de mantener un trabajo estable o de arriesgarnos a cambiarlo por otro más interesante, con quién casarnos, dónde vivir, qué apartamento alquilar, qué casa comprar, etcétera). Éstas son decisiones que no pueden tomarse friamente, sino que también requieren del concurso de los sentimientos. La pura lógica por sí sola no es suficiente para decidir en quién confiar o qué trabajo desempeñar, porque, en esos dominios, la razón no puede prescindir de los sentimientos, las emociones, los valores y la experiencia pasada.

AYUDA PSICOLÓGICA PARA SUPERAR ADICCIONES Y DEPENDENCIAS
La dependencia está agazapada en el bosque de las neuronas. Para bien y para mal, nuestro estado natural es la dependencia. El autocontrol es fruto de un duro proceso de liberación. Las drogas tienen un efecto reforzador colosal. Lo demuestra la experiencia con monos cocainómanos: en el laboratorio, los animales trabajan sin descanso, apretando una palanca hasta 12.000 veces, para conseguir una dosis única de cocaína. Eligen la cocaína antes que la comida, el agua, el sexo o la vida misma. Son capaces de resistir el poder del incentivo y mueren de sobredosis. El gesto del drogadicto que compra una papelina y se refugia apresuradamente detrás de la tapia más cercana para inyectársela recuerda el gesto convulsivo y triste del mono en el laboratorio, apretando frenéticamente la palanca. 

DISEÑAMOS UN PLAN PEDAGÓGICO PARA CADA NIÑO QUE PRIORIZA LA EDUCACIÓN DEL CARÁCTER DURANTE TODO EL PROCESO
Desarrollar la inteligencia, la memoria o la concentración está bien, pero no hace a las personas necesariamente más felices. La educación debe centrarse sobre todo en desarrollar el carácter de las personas; sus hábitos de orden, sinceridad, generosidad y prudencia. Nuestro trabajo psicopedagógico se dirige a este propósito y se basa en la convicción de que para lograrlo hay que dotar al tutor de la información necesaria para dirigir este proceso, tomando las decisiones y organizando las intervenciones pertinentes. No etiquetamos, porque aunque comparamos (un percentil es comparar con un grupo de 100 personas), defendemos que gracias a la educación podemos mejorar. Si cuantificamos, establecemos diferencias, metas y comparaciones, con la precaución de ser siempre positivos. Así se facilita el esfuerzo, porque hay una motivación tangible.
 La cuestión no está en cuánta información disponemos, sino en cómo debemos gestionar la información necesaria para alcanzar un conocimiento más profundo de nuestros clientes y en cómo usar ese conocimiento en favor de decisiones e intervenciones que desarrollen más sus competencias y sus habilidades.

3

Nuestro enfoque operativo del coaching personal y profesional

• Nuestra misión se centra en proporcionar una formación de marcado contenido humanista enfocada a desarrollar las habilidades necesarias para liderar organizaciones y empresas.
• "Para poner el mundo en orden, debemos primero poner orden en la nación; para poner orden en la nación, debemos antes poner orden en la familia; para poner orden en la familia, debemos cultivar nuestra vida personal, y para cultivar nuestra vida personal debemos arreglar nuestros corazones" CONFUCIO. 
• La verdadera prudencia es receptiva y abierta: está siempre alerta a las sugerencias del buen espíritu y acoge en el alma, con una atención vigilante, las palabras de los hombres justos que dan la agilidad característica de la inteligencia práctica.
• “La templanza salvaguarda la prudencia, porque es la templanza la que salva los juicios prácticos de la prudencia. El placer y el dolor, en efecto, no corrompen ni deforman todos clase de juicios (por ejemplo, el de si los ángulos del triángulo valen o no dos rectos) sino sólo los juicios prácticos, concernientes a la acción moral. Porque los principios de la acción son los fines por los cuales se obra. Pero el hombre embotado por el placer o el dolor pierde la percepción clara del principio, no puede deliberar acertadamente sobre las cosas buenas y provechosas para él (no las parcialmente provechosas, como cuáles son buenas para la salud o el vigor corporal, sino cuáles lo son para el bien general), ya no ve la necesidad de elegirlo todo y haberlo todo con vistas al fin o al bien último: el vicio lujurioso destruye el juicio práctico” (ARISTÓTELES, Ethic. VI, 5, 1140b).
• Los vicios que caracterizan y hacen al imprudente se originan principalmente de la lujuria. La lujuria embota la mente y el espíritu, es enemiga de la razón práctica y es causa de la imprudencia, porque la deleitación corrompe el juicio, absorbe el alma entera y la arrastra al deleite sensual. El que elige sin oír consejo no puede mantener la elección hecha, es inconstante; y lo mismo puede decirse de los que se descaminan por causa de la lujuria y abandonan por capricho. Por eso se llaman hijas de la lujuria: la ceguera de la mente, la precipitación, la inconsideración, la inconstancia, el amor propio, el rechazo de Dios, el amor al siglo presente y el horror del futuro. Cfr. TOMÁS DE AQUINO.
• La libertad es un gran don de Dios. A través de él los hombres podemos ejecutar acciones deliberadas. Dios quiere que usemos este don para que le amemos libremente. Por una parte, hacer el bien nos hace más libres. Por otra, la ignorancia y el pecado debilitan nuestra libertad. Jesús también nos dijo que la verdad nos hace libres. En la otra cara de la moneda está la responsabilidad, ya que ser libres no nos da derecho a hacer lo que queramos. La idea hoy dominante que confunde la libertad como espontaneidad, por la que la espontaneidad implica renunciar a la comprensión de la libertad y del amor, termina en el irracionalismo.
• En uso de su libertad de perderse, los aburguesados, corruptos y mediocres no quieren llevar una vida de pacífica alegría, sino de placer tranquilo, sin descartar algún lance de placer excitante. Para estos lo importante es no depender de nadie. Piensan ellos que cuando lo logren vivirán felices. Y es así como emprenden neciamente el camino de la esclavitud, en el que nunca se verán libres de la crueldad de sus tiranos. Imprudencia, insensatez, irracionalidad y pensamiento débil, son como vasos comunicantes. “Los intereses espontáneos, los que no pueden ser entendidos por la razón, todo eso es exactamente la locura” (HEGEL).
• La fidelidad a los principios racionales y a los compromisos libres nos va haciendo sabios y vamos adquiriendo certezas y verdades que nos vacunan y nos curan de todo lo que no es de Dios. Nos curan de la felicidad efímera y de la adicción al éxito. Grande es el poder de la fidelidad: la fidelidad salva al individuo, a la organización y al mundo. La fidelidad es obediencia en el tiempo. Grande es el poder de la obediencia a los Principios: es garantía de continuidad. La infidelidad, por el contrario, es garantía de entropía y de infelicidad.
• Estas verdades nos hacen entender que todo éxito es prematuro, que no podemos cantar victoria de momento, que no estamos hechos para triunfar en este mundo sino para servir. Hay que estar prevenidos contra el optimismo excesivo (si triunfo un poco ya todo va bien) y contra el pesimismo excesivo (si algo va mal ya todo va mal, si fallo en algo ya todo va mal). La infidelidad a los principios y a los compromisos nunca resuelve el problema. No es un buen modo de gestionar la complejidad. No es solución quemar los muebles para calentar la casa, quemar los vagones para tener el tren en marcha, huir hacia delante. Una dieta a base de grasas sacia pero mata.
• La corrupción, cuando logra entrar en un alma por un pequeño resquicio, la invade y la corroe poco a poco, aunque para ella misma los síntomas resulten imperceptibles. La corrupción individual aporta entropía o descomposición, y va deteriorando progresivamente su entorno. Son causa de este deterioro: la propaganda rastrera generalizada en la calle y en los medios, que tantas energías espirituales sofoca; los tópicos impuestos por las ideologías hoy dominantes que intoxican la familia, el ambiente laboral y la vida privada; y los errores y negligencias de padres y educadores que cercenan la sinceridad, fomentan el amor propio y facilitan que el alma se convierta en un lodazal y una charca inmunda.
• Como vivir sin coherencia y sin unidad de vida nos hace tremendamente infelices, el que no vive con arreglo a la recta razón acaba inventando su propia ridícula “filosofía”, al margen de la objetividad. Y acaba convencido de la certeza de sus propias mentiras. El que no vive como piensa, poco a poco va justificando su modo de vida con errores, torpes falacias e hipocresías, razonadas sinrazones.
• Como vivir sin coherencia y sin unidad de vida nos hace tremendamente infelices, el que no vive con arreglo a la recta razón acaba inventando su propia ridícula filosofía de medio pelo, al margen de la objetividad. Y acaba convencido de la certeza de sus propias mentiras. El que no vive como piensa, poco a poco va justificando su modo de vida con errores, torpes falacias e hipocresías, que son razonadas sinrazones. 

© Copyright 2007 Mentor&Faber